Cuentos selecionados

ENERO, MECANISMOS SUICIDAS, EL AMOR

                                                              La muerte aunque lenta llega,

los ojos desorbitados, la boca abierta

queriendo tragarse todo el aire de un tiron.

..

Pero un día,

queriendo ser un tú,      para saberte,

te agarré entre mis manos,

te  d e s h i c e,

y ya no pude armar el mecanismo.

Manuel de la Puebla

                                                                                       

Yo estaba enamorado de Nadia, toda la vida fue ella mi otra parte, ella junto al mar, con  los ojos en el horizonte y el pelo suelto, oliendo a salitre y peces, desparramada en la arena circular, entre las gaviotas y el diente de perro, el ángel de la muerte, marchándose de mi vida para siempre, ella no sería menos puta que las otras, ella era realmente puta, no quiero decía queriendo, esos zapatos no los quiero, queriéndolos, no te quiero, no queriéndote, no quedándose, ella tenía los ojos hacia el cielo, pero la muerte llega, le están acechando, lo sé desde que quiso marcharse, había dejado sus blúmers rojos en la cerca de palitos, junto al naranjo, se fue del lugar, vendría después, en uno de los trenes, vomitaría en el retrete maloliente, lo haría con un negro de esos que han estado la vida entera escapando, con los ojos más salidos del sitio, entonces ese día como quien ha estado sentado en la parte de atrás de la casa te dirá cariño y el blúmers que había dejado, entonces le muestras un bulto podrido, en el mismo lugar donde lo dejó, pero no lo has recogido, y qué has hecho mientras estaba en el portal,  esta casa tiene una pequeña planta espinosa para los malos ojos, ella tiene los ojos fijos en el cielo, ha tenido relaciones por unos cigarros raquíticos y aún mira el cielo, que nubes más jodidas no, le traigo un trago de café y me mira fijamente, que cara de asesino tienes, el mar a comenzado a bajar nuevamente, necesito unos pesos para ir allá, señala con el dedo pulgar, eso no es único en ella, la puta madre le ha enseñado, la he odiado unas millonésimas de segundo más de lo que me he establecido para esta tarea, se quita las chancletas y camina hasta el espejito que ha perdido parte del azogue, tengo este pelo de lo más roñoso eh, no la miro, estoy trasteando en la cocina y quizás comience a suministrarle un poco de cianuro en el café, ella se va en la tarde, ha dejado el blúmers rojo como siempre en la cerca y las chancletas regadas delante de la cama, tomo una libreta y continuo en uno de mis muchos croquis de formas de matarla, uno tiene un cuchillo anclado a la parte superior de la  puerta y con una cuerda y un contrapeso, y entonces he dibujado también un mono flaco que la representa, en cuanto cae el peso y otro es con la corriente, he pasado la mayor parte de la tarde entregado a estos placeres, ella viene riendo con un mulato que la deja frente a la casa y sonríen largamente antes de despedirse, guardo mi libreta de croquis y voy a sentarme en el portal, ella entra, ha escondido las alas oscuras, la siento destapando el termo en busca de café, este café algún día me va a matar, le escucho y observo la estructura circular de una de las nuevas construcciones para un área recreativa, que te pasa no vas a pelearme, ella eventualmente es tan puta que no tiene una idea exacta de si misma, estuve ahí en el parque, me entretengo destripando hormigas, se ha revuelto el hormiguero y pienso en uno de mis croquis, versión 2.1 este puede funcionar con hormigas perfectamente, la miro y algunas le ha comenzado a subir por la falda, en dos segundos han comenzado a picar, en que mierda estas pensando, no ves las hormigas,  ella camina rascándose, allá el televisor anuncia el tiempo, mañana no podrá ver el cielo.

Que porquería de vida, dice desde el cuarto, afuera llueve bestial, que coño es esto, pregunta y manotea con mi libreta de croquis en la mano, entonces viene y grita, me tira sobre la cara una a una las hojas de la libreta, grita y maldice como su jodida madre, en eso se te van las horas, maldito entupido, le he dado una patada en la boca que esta escupiendo una sangre negra y espesa, parte de la cara se le ha hinchado y por lo menos en unas dos semanas no podrá salir.

Pero ella es puta, se ha estado dando maquillaje durante horas para salir, las putas tienes una facilidad para inventar, cierra los ojos e imagina el cielo, ve a ver si las nubes parecen empedradas, el blúmers sigue sobre la cerca, descomponiéndose, algún día vendrá por él, entonces su final vendrá aleteando, entre las plumas a los ángeles se le pegan mariposas y cigarrillos muertos por el impacto, detrás del armario tengo mi libreta No. 2 de croquis, ya tengo unos doscientos planos, el último es ahogada en un poso con una piedra atada con alambre al cuello, mira so bruto como tengo la cara, entonces se marcha a la estación, ha estado esperando un tren que no llega, le han plantado como tantas veces, viene llorando y se sienta en la terraza,  quiero una casita mía, allá en los pinares,   le he suministrado la primera dosis * y está silbando en el camastro la muy puta,  de que color es la nube que estoy pensando, las nubes de ella dependen de si quiere tener sexo o no, jodete  entonces, ya no tengo ganas de jugar sus juegos fainos ** y está o no está, en algunos casos no lo sé, ha venido despeinada y maloliente, pienso que andaba con otros, qué te preocupa, ha sacado uno de sus senos, la mesa esta servida se sirve lo mejor, la blusa apenas guarda sus senos, el pelo le cae ahora grotescamente sobre la cara y lo aparta con un dedo embadurnado de grasa, quiero trabajar en una cafetería, estaba pensando que de enfermera le quedaría mejor, que quieres decir, enfermera es el colmo, bueno ya lleva seis tomas del veneno, tengo unas ganas de vomitar y me duele la cabeza, veo en el cielo las nubes desaparecer, te amo, tráeme un trago de café. Enseguida, le respondo, voy a la cocina y pongo un poco de agua a calentar, me sorprendo silbando una cancioncilla.   

     

              *cianuro no había he podido conseguir un poco de veneno para los ratones.  

             ** juegos sexuales que no recomiendo ha nadie.